sábado, 26 de mayo de 2012

NO JUEGUES CON MI CORAZÓN...¡NO MERECES QUE TE SIGA AMANDO!

Un día decides enfrentar la realidad, pero a nadie le gusta descubrir que hemos amado a quien no se lo ha merecido nunca, que estamos en una vida equivocada, que él no es para ti y que por tu propio bien la relación debe finalizar.

Nadie tiene derecho a menospreciar el amor que hemos regalado, es natural sentir rabia al descubrir que se ha jugado con nuestros sentimientos.

Estás en todo tu derecho de estar muy enojada y te sientes así, porque nadie tiene el poder de reírse de los sentimientos que has dado.

Cuando estás con alguien ya no existen las vergüenzas, los secretos se comparten, por lo tanto, ya no son “secretos” como tal; entregas todo de ti  y lo mínimo que exiges es honestidad. Esperas vivir y compartir tu vida con una persona digna, pero las cosas no siempre salen como queremos…

PERSONAS QUE DEBEMOS EVITAR

Todo lo que sale de nuestra boca puede herir y hundir a otras personas. El ser humano es muy sensible a las emociones y las palabras que a veces inocentemente decimos. La palabra tiene tanto potencial para dañar las relaciones que una vez alguien te hiere con sus palabras difícilmente te comportarás del mismo modo con esa persona.
Toda persona que vive en forma negativa nos va a herir. Las personas negativas no deberían estar a nuestro lado, aunque es fácil tener a alguien así en  nuestro entorno, amistades, familia, en el trabajo, algún compañero, etc.
Las personas negativas siempre ven malas intenciones en todo. Siempre tienen un comentario negativo acerca de nosotras, generalmente comentarios que van contra nuestro bienestar o felicidad.

EL TIEMPO ES EL MEJOR ALIADO PARA OLVIDAR


“No se acaba el amor con sólo decir adiós, cuanto menos te tengo más te recuerdo, quiero olvidarte, pero estás en mi mente…
Me pregunto mil veces si será verdad que algún día aprenderé a ignorarte, a no estar buscando en tu perfil qué haces, o mirando a ver quien ocupa hoy tu corazón…
Olvidar no es fácil, y aunque me hiciste daño, por algún motivo sigo buscando noticias tuyas.”
Y así es, pese a que nos hacen pasar por dolores que aniquilan nuestro corazón, acabamos preguntándonos qué ha sido de él, el hombre a quien le entregamos el corazón y que no lo supo cuidar.
La vida nos va enseñando que por muy negro que se vea el sendero, al final siempre hay una luz que nos traerá una nueva oportunidad, de volver a vivir de nuevo, con muchos menos fallos de los que ahora tenemos, pues desgraciadamente se aprende a golpe de sufrir y caer muchas veces. Así, a golpes, es como aprenderemos a ignorar quien que tanto mal nos hizo.