martes, 12 de junio de 2012

LOS PELIGROS DE LA BELLEZA COMERCIAL


Revistas, televisión, publicidad, Internet… en todos lados, miremos por donde miremos, hay mujeres mucho más bonitas que nosotras.
Cuerpos imposibles, cutis más suaves y perfectas que de bebés… ¿Cómo pueden haber mujeres tan afortunadas?
Se trata de la belleza comercial, la que nos venden pero nunca lograremos tener porque no es real.
Cuando miramos revistas, o televisión, la belleza se pasea ante nuestros ojos como un objeto de deseo inalcanzable. La sonrisa perfecta de Julia Roberts, el cuerpo de Beyoncé con sus prominentes glúteos, los labios de Angelina Jolie, las piernas de Jennifer López; etc., etc. etc.
Atributos ajenos, ansiados por quienes miran, suspiros que se desprenden desde nuestras carencias y necesidades.