Muchas veces nos encontramos en una situación donde las cosas no siempre están
como quisiéramos. Los problemas no faltan, las dificultades se destacan en todo
lo que hacemos, en fin... todo parece oscuro. Es justo en esos momentos donde
nuestra fuerza interior se pone a prueba, donde aquello que aprendimos deja de
ser teoría y tiene que volverse en práctica, seguramente todo sería mas
sencillo si las cosas fueran como deseamos, pero la vida así como las
estaciones tiene inviernos y veranos, en verano debemos prepararnos para el
invierno sin dejar de disfrutarlo. Los cambios son necesarios, y los ciclos nos
muestran el ritmo y la armonía que tiene la vida.
Después de cada túnel oscuro que atravesamos, la luz es mas intensa, maduramos, crecemos y si aprovechamos esos momentos de invierno, estaremos mejor preparados para enfrentar los siguientes momentos que la vida nos regala.
Después de cada túnel oscuro que atravesamos, la luz es mas intensa, maduramos, crecemos y si aprovechamos esos momentos de invierno, estaremos mejor preparados para enfrentar los siguientes momentos que la vida nos regala.